El Jardín de la Natura
en el Mas Generós
Para ubicar los cuatro elementos: tierra al norte, aire al
este, fuego en el sur y agua al oeste, tuve que hacer una excepción. ¡En el plano creé los espacios, pero el
elemento aire coincidía con la zona del mirador de los cipreses ... oh oh! Decidí mantener el mirador abierto al este y
desplazar al centro la zona del aire. De esta forma tenemos los tres elementos
tierra, aire y fuego en línea, y el agua hacia el oeste. Una maravilla porque
casualmente este eje central Tierra Aire Fuego se encuentra libre de árboles y
se ve muy claro desde el inicio del jardín hasta el fondo.
El primer
mandala que encontramos es el de la tierra - Norte - acompañado del símbolo
sánscrito AH. La tierra está
representada con materiales potentes como el hierro y la madera, y con
elementos de la naturaleza como la arena de la playa de Pals enmarcada en
círculos de hierro, pequeñas ramas de árboles dentro de un recipiente de hierro
oxidado y un anillo de tierra negra marcada con el rastrillo alrededor del
círculo de hierro. Los troncos de madera alrededor del mandala agudizan el
movimiento dinámico y amplían el espacio significado. El número de este mandala
es el 3 representado con 3 elementos circulares sobre el círculo central y 12
troncos alrededor del mandala.
El segundo
mandala es el aire - Este - acompañado del símbolo sánscrito HA y como lo mencioné,
está desplazado hacia el centro. Encontramos cerámica, hierro y vidrio sobre
una gran base de piedra de río. La cerámica azul utilizada en medio del mandala
la encontré en una de las giras por las casas de cerámica de La Bisbal en busca
de formas especiales de la zona. Encontré los 4 elementos de construcción para
crear cenefas, vi el círculo que generan y me enamoró. En segundo lugar
encontramos 4 círculos de hierro con elementos de la naturaleza y en el anillo
exterior del mandala tenemos 8 elementos de vidrio azul cobalto que dan color a
todo el jardín, es el aire presente con gran expresión. El volumen que le di a
la base de piedras de río me permitió hundir las piezas de cerámica en medio y
elevar las piezas de vidrio del círculo exterior. El número representado es el
4 que se multiplica a 8 con las piezas de vidrio.
El tercer mandala es el fuego - Sur - acompañado del símbolo sánscrito RA. El fuego está representado con un cono en bronce elevado en medio del círculo de piedras de río que se encuentra rodeado de 5 conos invertidos de hierro con una enigmática esfera de cristal en medio. La sorpresa fue descubrir la textura que toman las esferas al reflejar las piedras de río. Jugando con el volumen de la base de piedras elevé los elementos del centro y creé una superficie más baja alrededor para situar los 15 tubos de vidrio soplado de color ámbar que aportan una textura muy especial, es la música del fuego. ¡Estos cilindros tienen una larga historia que os contaré en privado! También tenemos elementos de la naturaleza a nivel de las piezas de vidrio que nos recuerdan el origen y el paso del fuego. El número representado es el 5 que se multiplica a 15 con las piezas de vidrio..
El cuarto
mandala es el agua - Oeste - acompañado del símbolo sánscrito VA. Este mandala
es diferente ya que está hecho con balas de paja y la sensación de círculo es
más espacial. Creé una forma estrellada con 6 balas de paja situadas en forma
axial. El espacio hexagonal que se crea entre las balas lo llené de tubos
sólidos de vidrio azul marino sobre un fondo de vidrio plano grabado con un
relieve de ondas de agua. Para acompañar el espacio tenemos una gran Musa en
hierro original de la escultora Núria Efe. La musa se encuentra sentada en el
extremo de una bala de paja como la gran guardiana del agua. El número representado
es el 6 y se replica en el número de elementos de paja.
El eje Este -
Oeste queda marcado en el Este por el espacio del mirador de los cipreses. Este
espacio se encuentra en el límite del terreno, es una zona amplia libre de árboles
que permite observar en la distancia los magníficos cipreses y la silueta de
Fonteta, un pueblo medieval excepcional conservado con mucho gusto. En este
espacio nos acompaña una escultura esbelta y sinuosa de un Moebius del escultor
Josep Canals que remarca la verticalidad y la elegancia de los árboles y del
paisaje que proponemos observar. Para disfrutar el paisaje es posible sentarse
en las balas de paja preparadas para los visitantes.
Junto al mandala del fuego, continuando el camino semicircular, tenemos el maravilloso espacio de Meditación acompañado del símbolo sánscrito OM. La idea fue mantener este espacio circular creado por los árboles de forma natural y significarlo con elementos que nos den mayor bienestar para hacer una meditación. Encontramos una plataforma circular de madera en el interior del espacio abrigada con textiles para disfrutar el momento. En la puerta nos recibe una escultura en mármol travertino de Pilar Aldana que representa los elementos de la naturaleza. El cubo es la tierra, la esfera es el agua, la pirámide es el fuego, la semiesfera es el aire y aquí tenemos un 5º elemento en forma de llama que se el éter o el espíritu. Esta obra realizada en 1990 esté basada en una gran estupa japonesa utilizada para rituales en los que se bailaba alrededor y se cantaban reiteradamente los 5 primeros sonidos del sánscrito que representan los 5 elementos de la naturaleza:
AH VA RA HA KA
Al fondo del
espacio tenemos una gran vasija de barro reposando sobre una bala de paja. El
creador es el ceramista, alfarero, maestro y gran conocedor de la historia de
la cerámica de la zona, Josep Matés, oriundo de Fonteta. Se trata de un objeto
original lleno de historia personal que hacía años reposaba bajo un olivo del
campo de su taller. ¡Ahora nos acompaña ante el mandala del fuego!
Con los
elementos naturales sigo marcando el espacio, así creo construcciones de
troncos, grupos de balas de paja, marco los caminos principales con rodajas de
corte de árbol, voy creando límites sutiles. Uno de los elementos que nos llegó
como propuesta de Conrad Sierra, vecino de Fonteta, fue una rueda de carro de
la época de la fabricación de cal en la zona. La rueda antigua marca un límite
en el jardín y la situé en el oeste como paso entre el bienestar de la casa y
el inicio de un viaje hacia el silencio de la naturaleza.
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